Hace unos días fuimos testigos de una boda real de ensueño, Carlos Felipe y Sofia de Suecia se dieron el sí quiero en la capilla del Palacio Real de Estocolmo. Unos de los secretos mejor guardados como siempre fue el vestido de la nueva princesa y como en el Protocolo está de Moda somos muy seguidores de las bodas reales en esta ocasión nos centraremos en el estilismo nupcial de Sofia Hellqvist.
Al ser una boda donde se es novia y princesa a la vez hay detalles que no pueden pasarse por alto, la imagen de la novia debe estar muy bien cuidado en cuanto a etiqueta & protocolo se refiere. Por ejemplo: hombros cubiertos, joyas representativas y maquillaje discreto como el de Sofía, efecto «beauty».
La diseñadora sueca Ida Sjöstedt dejo huella ya que la novia lució espectacular con ese vestido de encaje manga larga, el velo amantillado le dió un sabor muy elegante. Hay que mencionar que también tuvo un toque español porque tanto la seda base y el encaje fueron de la empresa española de tejidos José María Ruiz, firma de cabecera que utiliza Felipe Varela para sus diseños.
La diadema (qué no tiara según algunos expertos en protocolo) en oro blanco, diamantes y esmeraldas en las puntas, que fue un regalo de sus suegros los Reyes y que lució perfecta sobre un recogido bajo. El único detalle que quizás no me convenció del todo fue el ramo, que por cierto, estaba compuesto por rosas y mirto, este último una tradición en la Casa Real Sueca.
No cabe duda que las royals tienen esa virtud de acertar siempre, ¿será que tienen un gran equipo detrás? pero también hay que decirlo: el estilo y la percha hablan por sí solos.
Imágenes: AFP y GTres Online
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